Breves Apostolicos, y Cedulas Reales, en que se dispone, que de los crimenes tocantes a la Fè, se ha de hazer primero la causa contra los delinquentes, y sea privlegiada en tal manera, que esten todos los juezes obligados a remitir los Reos a la Inquisicion, para que en ella se conozca de los delitos tocantes a ella, y que luego sean remitidos a los oficiales seglares, para que ellos conozcan de los demas delitos profanos, de que estuvieren indiciados.
[S. l.: s. n., ca. 1570].
Folio menor; 6 h.; 31×22 cm.— Sin cubiertas.
No en Palau. No en Vekene. BS 2018 nº 24.
El impreso reúne cinco textos (en español), tres papales y dos de la corona española, sobre Inquisición.
1) Breve (o bula) del papa Julio III del 16 de marzo de 1550 decretando que los casos de herejía solo podían ser juzgados por los obispos y los inquisidores.
2) Traducción de la bula del papa Pío V titulada Si de protegendis datada el 1 de abril de 1569, protegiendo a todo el estamento inquisitorial (inquisidores, familiares, etc., e incluso testigos y denunciantes), tanto sus vidas como sus pertenencias privadas o institucionales. Los culpables de cualquier delito en contra de ellos, además de ser excomulgados, deberán serán juzgados siguiendo los mismos cánones que se aplican a los herejes.
3) Edición bajo un único epígrafe de dos decretos (¿resumidos?) del mismo Pío V, uno dirigido a eclesiásticos y seglares mandando obedecer a los cardenales e inquisidores en todo lo tocante al Santo Oficio y, el otro, exigiendo que todos los presos en cárceles civiles sobre los que pesen denuncias ante el Santo Oficio deben ser remitidos a la Inquisición, con independencia de la gravedad de sus delitos.
4) Cédula de los Reyes Católicos datada en Sevilla el 5 de abril de 1500 requiriendo al Conde de Benalcázar que entregue a la Inquisición a una “moça” presa en Herrera para ser interrogada y al alcaide Gutierre de Sotomayor para ser juzgado por haberse negado a entregarle a la reclusa al visitador de la Inquisición cuando estaba en la localidad. La moza en cuestión es la conocida como “profetisa Inés”, protagonista a su pesar de uno de los procesos contra judaizantes de las primeras décadas de actividad inquisitorial más singulares y llamativos.
5) Cédula de Felipe II fechada en Madrid el 13 de octubre de 1562 comunicando a los inquisidores que les va a entregar a un grupo de moriscos detenidos por el Capitán General de Granada para que puedan ser procesados por herejía.
