Sanctae Inquisitionis Hispanicae artes aliquot detectae, ac palam traductae. Exempla aliquot, praeter ea qu[a]eq[uem] loco in ipso opere sparsa sunt, seorsum reposita, in quibus easdem Inquisitorias artes veluti in tabulis quibusdam in ipso porró exercitio intueri licet. Addidimus appendicis vice piorum quorumdam martyrum Christi elogia ... / Reginaldo Gonsalvio Montano, authore.
Heidelbergae: excudebat Michael Schirat, 1567.
8º menor; [32], [4 en blanco], 297 p.; grabado xilográfico con la marca del impresor en verso de la p. 297; 16×10 cm.— Encuadernación antigua en pergamino, restaurada.
Palau 105548. Vekene 1071. Adams G-854. BS 2014B nº 2.
Editio princeps de la que se considera la primera obra crítica sobre la Inquisición española. No se sabe quién es el autor que se esconde detrás del pseudónimo Raimundo González Montes –Reginaldo Gonsalvio Montano según la portada del libro, o Reginaldo/Reinaldo Montano/de Montes como también se le denomina con frecuencia–, aunque parece claro que se trataba de un protestante español huido de la Península. Se han propuesto varios posibles autores tras este alias; entre otros Casiodoro de Reina (traductor de la Biblia del Oso) y Antonio del Corro.
Muy pronto traducida a otros idiomas (inglés, francés, alemán, holandés, etc.), reeditada en latín y ampliamente citada, alcanzó una muy considerable difusión en Europa. La primera edición en español se publicó en 1851 [→ 120]. Sanctae Inquisitionis Hispanicae artes es una aproximación pormenorizada a los fundamentos, criterios y formas de actuación de la institución, aportando, a modo de ejemplo, algunos casos (de los que muy probablemente fuera testigo el propio autor) de las persecuciones a protestantes muy próximos en el tiempo al momento de la publicación del libro, en particular en Sevilla en el periodo 1558-1562.
Aunque muy crítico con la Inquisición y con los inquisidores, tanto por sus objetivos como por sus prácticas, sus prejuicios hacia los conversos eran dignos del más rancio inquisidor, ya que en su libro justifica las persecuciones contra «las pestes de herejías judaicas y mahometanas», lo cual no deja de ser cuando menos paradójico ya que la mayoría de los alumbrados, reformistas y protestantes españoles de primera hora eran de origen judeoconverso.
